En 2011, The New York Times dio a conocer a la opinión pública el manifiesto titulado «Los Ocho Hábitos de los Managers de Google Altamente Efectivos». Se trataba del resultado de un proyecto del equipo de Recursos Humanos de Google basado, como no podía ser de otra forma, en un pormenorizado análisis estadístico de datos para correlacionar comportamientos de los managers de dicha compañía y la eficiencia en el liderazgo de personas y equipos.
El manifiesto recoge la síntesis de lo más básico que un manager de Google debe aprender a hacer de manera habitual si quiere dirigir bien a su gente. En realidad, no cuesta mucho descubrir que, de una manera sencilla y muy pedagógica, el gigante de internet supo dar, por vía analítica y empírica, con algunas de las principales y muy concretas claves del liderazgo, válidas para cualquier organización.
Estos son los ocho hábitos del liderazgo altamente efectivo, ordenados en el manifiesto de Google de acuerdo con su prioridad, de más a menos importantes (traduzco con alguna libertad de la versión de Business Insider):
1. Se un buen entrenador.
- Proporciona retroalimentación específica y constructiva, equilibrando lo negativo y lo positivo.
- Mantén regularmente encuentros uno a uno, presentando soluciones a los problemas a la medida de las fortalezas de los empleados.
2. Da poder a tu equipo y evita la micro-dirección.
- Consigue el equilibrio entre dar libertad de tus empleados y permanecer disponible para aconsejarles.
- Haz encargos que impliquen superación para que afronten problemas importantes.
3. Expresa interés por el éxito y el bienestar de los empleados.
- Conoce a tus empleados como personas que tienen vida fuera del trabajo.
- Haz que los nuevos se sientan bienvenidos, ayuda a facilitar su adaptación.
4. Se productivo y oriéntate a resultados.
- Céntrate en lo que quieres que el equipo logre y en cómo los empleados deben conseguirlo.
- Ayuda al equipo a priorizar el trabajo y toma decisiones para eliminar obstáculos.
5. Se un buen comunicador y escucha a tu equipo.
- La comunicación tiene una doble dirección: a la vez escuchar y compartir.
- Haz reuniones de todo el equipo y sé específico respecto a las metas del conjunto.
- Propicia el diálogo abierto y escucha las preguntas y las preocupaciones de tus empleados.
6. Ayuda a tus empleados en el desarrollo de sus carreras.
7. Ten una visión clara y una estrategia para el equipo.
- Incluso en medio de las crisis, mantén al equipo focalizado en las metas y la estrategia.
- Involucra al equipo en la definición y la evolución de la visión, las metas y los avances.
8. Ten las competencias técnicas clave, de forma que puedas ayudar y aconsejar al equipo.
- Remángate y trabaja pegado a tu equipo cuando sea necesario.
- Entiende los desafíos específicos del trabajo.
Jaime Urcelay